Las medidas para pelear la crisis que atraviesa la compañía también contempla la venta de la fábrica de televisores en Indonesia.
Continúan los problemas en la empresa japonesa Toshiba, luego de que se desclasificara el escándalo contable de USD$1.300. La compañía anunció que eliminará cerca de 6.800 empleos en el área de electrónica de consumo, para así tener una menor estructura y centrarla en el negocio de los semiconductores y la energía nuclear.
Además de esto, también se dio a conocer que pondrá en venta la fábrica de televisores en Indonesia, lo que sumado a lo anterior dará gastos cuantiosos y generará pérdidas que ya se anticipan serán cercanas a los USD$4.500 millones, para el periodo comprendido entre abril de 2015 y marzo de 2016. Estos números negativos contrastan con los USD$286 millones que registraron en el ejercicio anterior.
Toshiba atraviesa por una crisis importante, luego de que se revelara que había exagerado sus ganancias, alcanzando un total de USD$1.200 millones. Una práctica que habría llevado a cabo desde 2008 a 2014 y que provocó en julio pasado la salida del presidente, Hisao Tanaka.
El escándalo de la empresa se transformó en la peor a nivel corporativo en Japón desde 2011, cuando en dicho año se dio a conocer un fraude contable del equipo fotográfico Olympus.
La compañía también dijo que entre sus medidas para apalear esta crisis serán las de forjar alianzas con terceros en el negocio de los PCs, además de otras medidas como abandonar la venta de productos visuales a nivel internacional y centrarse en el mercado nipón.